NOTÍCIA ORIGINAL – lavanguardia.com – 20/01/2019
En poco más de dos meses, la farmacéutica Reig Jofre ha inaugurado una nueva fábrica en Toledo, con tecnología punta para fabricar antibióticos, en la que ha invertido 10 millones de euros, y ha puesto la primera piedra de otra en Sant Joan Despí, en la que invertirá otros 30 millones para producir medicamentos inyectables y liofilizados y que será la más avanzada de Europa.
Ignasi Biosca, consejero delegado de la empresa, señala que “llevamos la industria en el ADN. Apostamos por la fabricación, pero sólo de procesos muy especializados. Fabricar para terceros deja poco margen, pero no así en esos medicamentos, y la automatización nos hace más eficientes. También podremos entrar en mercados donde los precios son más altos y que ahora no tenemos capacidad para servir”, asegura.
La fabricación para terceros aporta aproximadamente la mitad de la facturación de Reig Jofre (de 168 millones en 2017). El 30% de las ventas corresponde a productos de especialidad, de desarrollo propio (principalmente en dermatología y ginecología), y el restante 20% al área de autocui
dado de la salud, donde opera con la marca Forte Pharma. Esta compañía francesa, adquirida en 2015 y que factura 30 millones de euros centrada en Francia y Bélgica, está creciendo en España y Portugal. “Queremos crecer en el mercado de la salud, que es mayor que el de la enfermedad”, señala.
Reig Jofre es una empresa familiar que este año celebra su 90 aniversario: Ramon Reig Jofre fundó el laboratorio en la rebotica de su farmacia de Gràcia, en Barcelona. Acabada la guerra empezó a “industrializar” la producción de sus fórmulas magistrales y se trasladó aunanueva sede en la calle Pi Maragall. En los años 70 se incorporaron a la empresa sus hijas Maria Rosa, Montserrat e Isabel Reig López (actual presidenta), dejando la gerencia a su esposo, Juan María Biosca. “Fue el artífice del crecimiento de Reig, con la compradela fábrica de Toledo a GSK y comprando firmas locales”. Ignasi Biosca, su hijo, es la tercera generación familiar junto a su primo, Alex García, vicepresidente y director financiero
La familia controla ahora el 72% del capital de Reig Jofre: en 2015sefusionóconNatraceutical, que cotizaba en bolsa, y ahora el 28% son accionistas minoritarios. “Salir al mercado fue una decisión arriesgada,pero ha ido muy bien y lo recomendaría a todas las empresas familiares: ayuda a separar la familia y la empresa y a profesionalizar la gestión. También equilibra la visión a largo plazo, que tenemos las familias, con la exigencia de resultados trimestrales para los inversores”.
Biosca se convirtió en consejero delegado de Reig Jofre en 2006, pocos meses después de incorporarse a la empresa, forzado por una enfermedad de su padre. Ingeniero de telecomunicaciones de formación, acabó sus estudios en París y empezó a trabajar en France Telecom con los pioneros de internet (“ni siquiera se había creado la www”, señala) y luego en informática. A los pocos años decidió inclinarse por la gestión y volvió a España a cursar un MBA en el IESE. En 1998 se incorporó al grupo Havas a dirigir la división digital en España. La crisis de las puntocom frenó el desarrollo del marketing digital… pero sólo brevemente y a los pocos años Biosca estaba poniendo en marcha agencias de marketing digital para el grupo en Estados Unidos, China, India y Latinoamérica. “Un año llegué a tomar 150 aviones. Cuando un verano le dije a mi padre que me estaba planteando un cambio de vida y que podría interesarme trabajar en la empresa me tomó la palabra y me hizo empezar el1 de septiembre”, recuerda. Reig Jofre encara ahora su futuro reforzando la I+D, a la que destina cada año el 5% de su facturación. Con ventas ya en 67 países, su retoes crecer en algunos de los países más poblados del mundo como Japón, Indonesia, Filipinas o Estados Unidos. “Ahí ya tenemos estructura comercial, pero no podíamos ganar mercado porque no podíamos producir más. Y cuando estás en un país como proveedor es más fácil luego introducir también tus propios fármacos”, resume.
